Por Edwin Gamboa, fundador Caja Negra
Las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial 2026 han pasado de ser una competencia deportiva a una tragicomedia continental. Cada fecha deja un nuevo meme, un DT tambaleante y una tabla que exige matemática, fe y terapia emocional. Con 6.5 cupos para 10 selecciones, uno podría pensar que clasificarse es casi automático. Pero no. Para algunos equipos, como Bolivia, Perú y Chile, esta clasificatoria se parece más a un juego de escape que a una ruta hacia la gloria.
Con la fecha 15 finalizada, la tabla nos habla claro (aunque algunos prefieran no escuchar). Hay quienes ya tienen un pie en Norteamérica, otros que aún se aferran a la calculadora de siempre, y algunos que ya deberían estar comprando televisores para ver el Mundial desde la sala.
Zona de privilegio: los que ya están haciendo las maletas
Argentina (34 pts): Con Messi o sin Messi, la albiceleste se pasea por la clasificatoria como si fuera un amistoso extendido. 11 victorias, 1 empate, 3 derrotas y un saldo de goles que haría sonrojar a más de uno. La Scaloneta ya tiene el pasaje sellado. El verdadero dilema argentino es si irán en clase turista o ejecutiva. O si Messi irá en avión privado directo desde Miami con mate incluido.
Ecuador (24 pts) y Paraguay (24 pts): Sorprendentes, sólidos y efectivos. Dos equipos que, sin hacer mucho ruido, se han posicionado en el podio. Ecuador combina juventud con orden, mientras Paraguay ha hecho del 1-0 una obra de arte nacional. Ninguno brilla, pero ambos suman, que es lo único que importa aquí. Ecuador incluso arrancó con puntos restados, pero hoy está tranquilo. Paraguay, por su parte, juega con una eficacia que le gustaría a más de un banco suizo.
Brasil (22 pts): Están cuartos, pero con el ritmo y el susto de quien perdió el GPS. Brasil ha dejado de bailar samba para intentar bailar TikTok. Aún así, el talento les alcanza para clasificar. El problema es que sus hinchas esperan que ganen jugando bonito, no que se arrastren ganando 1-0 a Bolivia. Ya no hay Ronaldinhos, solo reels.
Zona de repechaje y tensión: entre la esperanza y el insomnio
Uruguay y Colombia (21 pts): Mismos puntos, filosofías distintas. Bielsa ha hecho de Uruguay un equipo agresivo, intenso, con hambre. Colombia, en cambio, es la selección del equilibrio: gana poco, pierde poco, empata mucho y duerme a sus hinchas, pero suma. Ambos deberían clasificar si no se complican solos (cosa que pasa seguido). Colombia ha dejado de depender de James y ahora juega en equipo, algo revolucionario para algunos técnicos de por aquí.
Venezuela (18 pts): Sí, leíste bien. Venezuela está séptima y en la pelea. Ha dejado de ser la «Cenicienta» para convertirse en la selección que nadie quiere enfrentar. Con 4 victorias y 6 empates, están a solo un pasito del repechaje. Dos puntos más y los memes dejarán de ser burla para ser envidia. Que no nos sorprenda ver a la Vinotinto bailando salsa en Nueva Jersey.
Zona de eliminados sin anestesia: entre lágrimas y excusas recicladas
Bolivia (14 pts): Hizo lo suyo en la altura y sumó puntos que no alcanzan. Como siempre. De visitante es un sparring con camiseta verde. Aun así, tienen más goles que Perú y Chile juntos (dato real y deprimente). La única certeza boliviana es que sus puntos vienen con oxígeno.
Perú (11 pts): Hay más esperanzas que goles. Más entrenadores que ideas. La bicolor vive del recuerdo de Rusia 2018, pero los rivales ya están en 2026. El último clavo en el ataúd: una diferencia de -11, solo 2 partidos ganados y apenas 6 goles en 15 partidos. Matemáticamente no está eliminado. Emocionalmente, hace rato. Cada fecha, Perú estrena un nuevo milagro y actualiza su aplicación de calculadora. Su presente deportivo es un tributo involuntario a la nostalgia.
Chile (10 pts): La generación dorada ya está oxidada. Nadie entiende qué juega Chile, y probablemente ellos tampoco. Con 22 goles en contra y un saldo negativo de -13, la estadística no miente: son los peores de la clasificatoria. Pero eso sí, cada semana hay una conferencia donde alguien promete que «aún se puede». Se puede, sí… apagar la luz y empezar a reconstruir desde cero.
Conclusión
Las Eliminatorias Sudamericanas son una telenovela de 18 capítulos, donde el drama nunca falta. Hay protagonistas consolidados, actores de reparto que sueñan con brillar, y algunos personajes que no deberían haber salido del casting. Las excusas se renuevan más que las camisetas.
A tres fechas del final, los lugares empiezan a definirse. Argentina ya reserva hotel en Nueva York. Ecuador, Paraguay y Brasil hacen cálculos para no perder el vuelo. Uruguay y Colombia intentan evitar el repechaje, mientras Venezuela sigue aferrada a su guion de «historia milagrosa». Bolivia, Perú y Chile… bueno, que no se les acaben las calculadoras ni las excusas.
Lo único seguro es que el Mundial tendrá nuevos invitados, nuevos memes y nuevas decepciones. Pero mientras tanto, en Sudamérica, el fútbol sigue siendo pasión, locura y, sobre todo, una excusa perfecta para pelear en WhatsApp.
Nos vemos en la fecha 16. O en el psicólogo. Lo que venga primero.